El Horizonte de la movilidad: Diésel frente a alternativas emergentes

En el amplio espectro de fuentes de energía que impulsan la maquinaria mundial, la constante evolución es evidente. Ciertas energías se desvanecen, otras emergen y algunas permanecen arraigadas en la infraestructura global, destacándose por su durabilidad y confiabilidad.

El diésel, junto con su pariente más verde, el biodiésel, sigue siendo la columna vertebral de las máquinas off-road y el transporte pesado de carga en las clases de camiones 3-8.

Un análisis realizado por S&P Global, y resaltado por el Diesel Technology Forum (DTF), revela que de los 15 millones de camiones comerciales en dichas clases, tres cuartas partes están movilizados por diésel. Y de estos, casi la mitad son vehículos de tecnología avanzada de nueva generación. 

El papel de Noxguard en este panorama

La entrada de Noxguard Diesel Exhaust Fluid es crucial en este contexto. Aproximadamente el 60% de estos camiones son modelos 2007 o más recientes, equipados con sistemas de filtración avanzados para el control de emisiones, muchos de los cuales utilizan la Reducción Catalítica Selectiva (SCR). 

Estos sistemas están alcanzando emisiones casi nulas, una tendencia acelerada por las normativas más estrictas de la EPA en su camino hacia emisiones "cercanas a cero". Los datos sugieren que la implementación de las últimas tecnologías en reducción de emisiones podría dar como resultado la eliminación de 1.3 billones de toneladas métricas de contaminantes a lo largo de esta década.

Al respecto, Allen Schaeffer, Director Ejecutivo de DTF, reflexiona sobre el futuro energético del transporte pesado: "Incluso con el avance de tecnologías de cero emisiones, el consenso es que el diésel continuará predominando en estos sectores por décadas. La tecnología diésel es la elección preferida por su conjunto de ventajas en términos de seguridad, eficiencia, fiabilidad, durabilidad y economía. Las infraestructuras de abastecimiento, mantenimiento y repuestos, bien establecidas a lo largo y ancho del país, así como los robustos mercados secundarios de reventa, son factores diferenciadores”. 

Además, explicó que considerando las tecnologías diésel avanzadas de hoy con emisiones casi nulas, y la proyección de aún más mejoras, junto con la capacidad para operar con una variedad de biocombustibles diésel renovables de baja huella de carbono, la permanencia del diésel en el futuro es prácticamente indiscutible.